Te preocupa…

no tienes fotografías para presentar de manera atractiva tu persona y tu negocio

no publicas online porque no tienes buenas fotos, y tampoco tienes tiempo y recursos para hacerte sesiones en casa (DIY do it yourself:)

tus fotos son anticuadas

no te llegan clientes ideales porque tu comunicado visual envía señales erróneos

tu imagen de marca no transmite la calidad de tus productos

tu negocio ha evolucionado y tus fotos no reflejan esa evolución

no creces en Instagram, porque no te dejas conocer, no enseñas tu cara, tu personalidad, quién eres

te abruma la cámara porque te parece que no sabes posar

vas a precio porque las fotos que tienes no te dan la suficiente seguridad

¿todavía tienes dudas?

Ponte en los zapatos en tu potencial cliente y piensa en lo que ve cuando entra en tus espacios en internet, que emociones le acompañan:

¿Tiene la oportunidad de conocerte y confiar en ti?

¿Puede identificarse contigo cuando se trata de valores, estilo de vida, intereses…?

¿Ve a alguien quién es profesional?

Ahora ¿qué ves y sientes tú viendo tus espacios en internet?

¿Tus fotos te hacen justicia?

¿Tus fotos te representan como emprendedor/a y persona que eres?

¿Transmites lo que quieres transmitir?

¿Tus fotos son actuales y profesionales?

Crees que con las fotos que tienes ¿el público percibe la calidad y valor de tus productos o servicios?

¿Todas tus fotos tienen el mismo estilo?

¿Las fotos son coherentes con tu branding, con la esencia de tu marca?