Este año conseguí acercarme bastante a las procesiones de Viernes Santo en Barcelona. Una procesión sale siempre de la iglesia de Sant Jaume y otra de la iglesia de San Agustín y las dos pasan por La Rambla. Allí es donde conseguir la vista completa de los pasos es muy difícil, pero en fin y al cabo ver todo no es lo más importante sino ver lo suficiente para sacar fotos interesantes incluso con los hombros y las cabezas de las personas que tenemos al lado y por delante. Todo construye un ambiente solemne, misterioso aunque la tecnología destaca en cada lado, hasta he visto cuando a un nazareno le sonó el móvil y el pobre intentaba un buen rato meter la mano al capirote. Aquí os dejo el reportaje de las procesiones de esta Semana Santa en Barcelona y Castelldefels.
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